1. Basílica de San Pedro

Basílica de San Pedro
Entrada:Gratis
Esta es (probablemente) la iglesia más impresionante que verá en su vida. La Basílica de San Pedro es la iglesia más grande del mundo, con una cúpula de 42 metros de diámetro, llegando a 138 metros de altura! El opulento interior y el exterior del edificio son indescriptibles, y hay obras de arte almacenadas de grandes maestros como Miguel Ángel y Bernini. Para completar el recorrido, vale la pena subir hasta la cúpula y disfrutar de la vista de la Plaza de San Pedro (esta parte de la gira se paga) o ver las tumbas de San Pedro, y todos los papas de la historia, que se encuentran en el suelo de la Basílica. Hay que verla!
2. Coliseo

Coliseo
Entrada:12 euros (incluye visita al Foro Romano)
En Roma no hay escasez de edificios impresionantes pero el Coliseo es el más sorprendente de todos! Aunque en ruinas, esta estructura nunca deja de impresionar a los millones de turistas que visitan Roma cada año. Incluso si usted prefiere no conocerlo por dentro y ver cómo era el funcionamiento de este edificio en su tiempo de máximo apogeo, seguro que no se arrepentirá de verlo por fuera como también el Arco de Constantino, que está al lado y es también muy hermoso. No olvide visitar el edificio por la noche también, ya que la iluminación es un espectáculo.
3. Fontana de Trevi (Fontana di Trevi)

Fontana de Trevi (Fontana di Trevi)
La Fontana de Trevi se encuentra al final del Aqua Virgo, un acueducto construido en el año 19 a.C. y que lleva el agua de un manantial natural ubicado a 20 kilómetros de Roma. Escuche el sonido del agua que se aproxima a la fuente… da una sensación muy especial, y el tamaño y la belleza del lugar sin duda le dejará con la boca abierta! No olvide tirar una moneda al aire por encima de su hombro izquierdo (si quiere volver a Roma) o cuatro monedas (si quiere volver a Roma con alguien) dentro de la fuente. ¡Realmente funciona!
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